Rezago habitacional en México de 8.7 millones de viviendas
El rezago habitacional en México disminuyó a 8.7 millones de viviendas durante los dos primeros años de la administración del presidente Enrique Peña Nieto, informó Jesús Murillo Karam, secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).
Durante la inauguración de la XXVII Reunión Nacional del Consejo Nacional de Organismo Estatales de Vivienda (Conorevi), el funcionario reveló que con la creación de la Sedatu y la Nueva Política de Vivienda, la necesidad de vivienda en el país se redujo en un millón de acciones, cuando al inicio del sexenio era de 9.7 millones.
Agregó que el reto para la industria es continuar con una política de Desarrollo Urbano a largo plazo, de tal manera que el sector no sólo se limite a construir casas, sino a mejorar la calidad de vida de los mexicanos.
“No se trata de acumular ladrillos, concreto y madera, crear un refugio para las personas o un patrimonio familiar. Es mucho más que eso. Es la unidad de la vida en una urbe y por consecuencia no puede pensarse en la construcción de la vivienda sin pensarse en los espacios requeridos para desarrollar la vida en común”.
“Eso es el desarrollo urbano. Que haya espacios con comodidades, oportunidades y reglas fundamentales de convivencia que nos permitan alcanzar la paz y la tranquilidad”, expresó.
El funcionario enfatizó que si bien en la actualidad existen polígonos de contención urbana, en los gobiernos locales se debe impulsar una política de desarrollo urbano que tenga efectos a largo plazo.
Por su parte, Francisco Vega de Lamadrid, gobernador de Baja California, señaló que, si bien la entidad es 5to lugar en déficit de vivienda, debe de considerarse que es un estado fronterizo, por lo cual no puede medirse con el mismo estándar que los demás, aunque aclaró que no se le resta importancia al tópico.
“Somos un estado de oportunidades y por ende tenemos un gran índice de migración, lo que a su vez produce un crecimiento natural propio muy fuerte. Manejar ese ritmo es prácticamente imposible. Las estimaciones son de que cada año alrededor de 50 o 60 mil mexicanos deciden venir para acá, por lo que la vivienda es un tema primordial”, argumentó.
El gobernador reparó en la problemática de las casas abandonadas, resaltando que además de ser un abandono de patrimonio representa en un problema social ante la posibilidad de que se conviertan en nidos de delincuencia.
“Hay que revisar la ley para hacer frente a esos problemas porque quien adquiere una vivienda adquiere una propiedad que tiene un fundamento jurídico, por lo que se requiere un proceso legal para retirarla y adjudicarla a quien corresponda, evitando que caiga en manos equivocadas”, urgió.
El alcalde de Tijuana, Jorge Astiazarán, añadió que hay más de 5 mil viviendas abandonadas en los desarrollos habitacionales ubicados en la periferia de la ciudad, pero rescató que ya hay un programa ejecutándose en coordinación con Infonavit, en el que se arreglarán y venderán esas casas e incluso algunas se convertirán en estancias y centros comunitarios.