La visita de Macri a Trump, un intento por mantener las relaciones con EE.UU.
El viaje a Estados Unidos del presidente argentino, Mauricio Macri, fue “necesario”, según los analistas, para mantener con Donald Trump las buenas relaciones que estableció con su antecesor, Barack Obama, durante la visita que realizó el exmandatario estadounidense a Buenos Aires.
El encuentro entre ambos empresarios reconvertidos en políticos se produjo en un clima distendido del que Macri salió con palabras de respaldo por parte de su par y algunas promesas.
El mandatario argentino llegó a la Casa Blanca con una petición clara para su colega: la reapertura de las importaciones de limón y biodiesel, dos de los principales productos que Argentina vendía a Estados Unidos antes de la asunción de Trump y que quedaron paralizadas temporalmente tras el cambio de Gobierno.
Sobre el comercio de cítricos, Trump le confirmó a Macri que realizará una “una consideración muy seria” del asunto y anticipó, tras su reunión con el mandatario argentino, estar “muy predispuesto a favor” de levantar el veto.
A pesar de los conflictos internos de ambos dirigentes, el encuentro se produjo en el momento oportuno, según los analistas consultados por Efe, que consideraron la reunión bilateral “necesaria” para los intereses comerciales de Argentina.
“Todo gesto de vinculación con el mundo tras el aislamiento de los últimos años sirve para recuperar reputación. La reunión es importante desde el punto de vista estratégico”, asegura Marcelo Elizondo, director de la consultora Desarrollo de Negocios Internacionales (DNI).
La visita era una pieza esencial del plan del Ejecutivo macrista de volver a recuperar las relaciones con los principales países del mundo tras la etapa de aislamiento que protagonizó su antecesora, Cristina Fernández (2007-2015), una estrategia que le ha granjeado una gran popularidad en el exterior.
En este sentido, Elizondo ve indispensable recuperar la relación con uno de los principales socios comerciales de Argentina, cuyas importaciones al país austral, según datos de la consultora, crecieron de 3.433 millones de dólares en 2015 a 4.484 el año pasado.
Además, Estados Unidos es el principal inversor extranjero de Argentina, con unos 27.000 millones de dólares, un dato que para el experto no es menor, especialmente cuando Macri fió buena parte del éxito de sus políticas económicas a la llegada de dinero del exterior.
Pero la relevancia de la visita tiene también un impacto a nivel geoestratégico en la región, de acuerdo con el director de la consultora Polilat, Jorge Arias, quien considera “esperable” que Macri ejerza “un rol activo” a partir de ahora como portavoz de los países alineados políticamente a Argentina en el continente.
“Argentina tiene ventajas comparativas en ese mundo ‘Trump’. Tiene una mirada parecida con Trump sobre el mundo de los negocios, en ese sentido puede encontrar un código de diálogo”, asegura el experto.
No obstante, de director del Centro de Opinión Pública de la Universidad de Belgrano, Orlando D’Adamo, se muestra menos optimista sobre las relaciones entre ambos presidentes, ya que Macri estableció muy buenos lazos con Barack Obama.
“Si hubiera ganado Hillary sería un lecho de rosas, pero con Trump, no es el mejor antecedente”, expresó en diálogo con Efe.
Para Rosendo Fraga, director del Centro de estudios Unión para la Nueva Mayoría, el encuentro es una muestra de que Macri dirige “un país relevante en la región” para Estados Unidos, sobre todo cuando Trump decidió buscar alianzas solo con tres países latinoamericanos: Perú, Colombia y Argentina.
“Lo más importante será si se logra retomar una agenda intensa elaborada con Obama, por parte de un sucesor que trata de mostrarse en las antípodas y eso se irá viendo en los próximos meses”, añadió Fraga.
La analista política Gretel Ledo coincidió con Fraga en que durante la gestión de Obama las relaciones fueron “excelentes” y que el encuentro busca “profundizar ese vínculo”, al tiempo que pretende consolidar el posicionamiento estratégico de Argentina en la escena internacional.
“No importa el momento en el que se encuentra Estados Unidos, lo importante es que estamos descongelando una relación bilateral”, concluyó.